El trabajo decente, en cuanto concepto
y programa, fue introducido y promovido inicialmente por la Organización
Internacional del Trabajo (OIT) en 1999. Su director general, el chileno Juan
Somalia lo propone como expresión de las condiciones que permiten a todas las
personas vivir con dignidad.
El 1º de mayo de 2000, Juan Pablo II,
con ocasión del Jubileo de los Trabajadores, lanzó un llamamiento para «una
coalición mundial a favor del trabajo decente», alentando la estrategia de la Organización Internacional
del Trabajo. Más tarde, noviembre de 2008, esta idea tomó forma en el congreso
fundacional de la Confederación Sindical Internacional (CSI), resultado de la
unión entre las antiguas centrales sindicales CMT, de origen cristiano, y
CIOSL, de origen socialdemócrata.
"Pero ¿qué significa la palabra
«decente» aplicada al trabajo? Significa un trabajo que, en cualquier sociedad,
sea expresión de la dignidad esencial de todo hombre o mujer: un trabajo
libremente elegido, que asocie efectivamente a los trabajadores, hombres y
mujeres, al desarrollo de su comunidad; un trabajo que, de este modo, haga que
los trabajadores sean respetados, evitando toda discriminación; un trabajo que
permita satisfacer las necesidades de las familias y escolarizar a los hijos sin
que se vean obligados a trabajar; un trabajo que consienta a los trabajadores
organizarse libremente y hacer oír su voz; un trabajo que deje espacio para
reencontrarse adecuadamente con las propias raíces en el ámbito personal,
familiar y espiritual; un trabajo que asegure una condición digna a los
trabajadores que llegan a la jubilación.”[1]
Trabajo Decente no es:
·
Más
de 4 millones de desempleados en España. (+información)
·
La
Comunidad Valenciana, con un 27,4% registra la sexta tasa más alta de
temporalidad en el empleo, punto y medio por encima de la media nacional, que
es del 25,8%. (+información)· Alicante cuenta con 28.000 hogares en los que no entran ingresos, 500 más que hace un año. (+información)
· Desde que se inició la aplicación de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, aprobada en 1995, el número de accidentes laborales ha aumentado un 29,6 por ciento. (+información)
· En 2004, los trabajadores que no llegaban al salario mínimo representaban el 6% de todos los ocupados y a finales de 2009 ya superaba el 10%. (+información)
· La contratación indefinida en la provincia de Alicante se ha desplomado casi un 50% desde el año 2007 en la provincia de Alicante. En 2010 se realizaron únicamente 40.675 contratos indefinidos sobre un total de 402.624 contrataciones en todos los sectores. (+información)
· Más de 30.000 personas en la Comunidad Valenciana se han visto forzadas por la situación económica a trabajar los fines de semana. (+información)
· Trabajo detecta, en la provincia de Alicante, 11 fraudes diarios a la Seguridad Social por el repunte de la crisis. (+información)
· Uno de cada dos jóvenes alicantinos no encuentra trabajo. (+información)
· Alicante tiene la tasa de desempleo femenino más elevada del País Valenciano. (+información)
“Al considerar los problemas del
desarrollo, se ha de resaltar la relación entre pobreza y desocupación. Los
pobres son en muchos casos el resultado de la violación de la dignidad del
trabajo humano, bien porque se limitan sus posibilidades (desocupación,
subocupación), bien porque se devalúan «los derechos que fluyen del mismo,
especialmente el derecho al justo salario, a la seguridad de la persona del
trabajador y de su familia»"[2].
Los cristianos volvemos a tener con
estas jornadas una oportunidad para testimoniar a Jesucristo en esta realidad
sufriente y vivirla como acción de gracias.
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