(En Elche, un grupo de personas han puesto en marcha una iniciativa para lanzar una "palmera" pirotécnica en honor a la Virgen de la Asunción el próximo 29 de diciembre)
Siento el respeto más grande por la persona, o las personas que, han tenido esta iniciativa. Estoy seguro de la buena voluntad que hay en este gesto. Supongo que no habrá intereses, implícitos o explícitos, detrás de esta acción. Me siento de la misma Iglesia y en comunión, con las personas que promueven la iniciativa. Voy a exponer, lo que pienso de este asunto, a partir de la misma fe que tienen estas personas.
Aparece en los Evangelios que Jesús y su madre, la Virgen María, y José, eran personas muy pobres, trabajadores sencillos que se ganaban la vida con el trabajo de cada día que no siempre tenían, como les ocurre ahora, a los más pobres. Lo que digo, no sale de esquemas ideológicos míos, sino de la Sagrada Escritura y del estudio de la historia. Tanto Jesús como su familia, durante su vida, y después de resucitar, renunciaron a todos los lujos, y pompas de este mundo. Jesús no cayó en la tentación de “la buena vida” de “la fama” y del “poder”.(Mt 4,1-10) Y dijo a sus discípulos que fueran por el mundo anunciando el Evangelio de la forma más encilla y más pobre. La riqueza, la parafernalia y el poder, no tienen que ver nada con Jesús y con la Iglesia que él fundó.
Muchas veces nosotros, partiendo de nuestras formas de ver la vida y también de nuestros intereses (yo también me incluyo), utilizamos a Jesús y a su madre la Virgen María, para hacer cosas, no acordes con lo que ellos quieren, sino con el mundo en que vivimos. Si una persona rica va cargada de joyas, los que tienen que agradecer algo a Jesús, o a su madre María, cargan de joyas sus imágenes, y de espectáculos y de parafernalias. Pero esto no tiene que ver nada con el pensamiento de Jesús, sino con nuestras ideas o con nuestros caprichos, intereses, tradiciones... Creo sinceramente que esta iniciativa y otras parecidas, chocan frontalmente con el Evangelio. Jesús y la Virgen, no necesitan la luz fugaz de una palmera, sino la luz de nuestro testimonio cristiano, ya que somos “luz del mundo y sal de la tierra” Mt 5,13-14), la luz de nuestra fe y de nuestro amor. Este es el camino de la “nueva evangelización”, no lo fuegos artificiales.
Tampoco esta iniciativa ha tenido en cuenta a las personas que se han alejado de la Iglesia y a los hermanos separados. Mucha gente, al contemplar estas cosas, saca en conclusión de que, la religión, sirve para el espectáculo y también para el derroche, aunque, de rebote, contribuya a atraer el turismo. La cosa sube de tono con la que está cayendo, al hacer un gasto de 6.000 euros. Nuestra sociedad, las personas un poco razonables, no pueden (ni deben) comprender que nosotros aumentemos en un céntimo nuestros actos de culto mientras haya una sola personas que esté pasando necesidad. Más bien las personas, con un poco de sensibilidad evangélica, o simplemente razonables, piensan que la Iglesia debe recortar, al máximo, sus gastos en el culto.. por coherencia y por humanidad.
Y por si faltaba algo, en las huchas de recogida de dinero para la palmera, se ha puesto el nombre Cáritas, alegando que si se recoge más de lo que cuesta, el dinero se dará a esta institución de la Iglesia. Cuando, precisamente, debería ser al contrario: Vamos a recoger dinero para los pobres, y cuando estén resueltos todos los problemas, nos plantearemos si hay que hacer algo para fomentar la fe del pueblo cristiano, en Jesús y en María.
Cualquier persona tiene derecho a hacer lo que crea conveniente, pero no debe mezclar a la Iglesia, ni a Cáritas. Si queremos ofrecer al mundo el Evangelio de Jesús, no creemos más confusión y más problemas de los que tiene la sociedad con la Iglesia. Ya hay más que suficientes.
Pepe Lozano
Consiliario Diocesano
HOAC Orihuela-Alicante
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